Crítica: STAR TREK (2009)

* * * * *

Título original: Star Trek
Año: 2009
Nacionalidad: EEUU
Duración: 127 minutos
Dirección: J. J. Abrams

Intérpretes: Chris Pine (James T. Kirk); Zachary Quinto (Spock); Eric Bana (Nero); Zoe Saldana (Uhura); Karl Urban (Bones); John Cho (Hikaru Sulu); Bruce Greenwood (Capitán Pike); Simon Pegg (Scotty); Faran Tahir (Capitán Robau); Anton Yelchin (Pavel Chekov); Leonard Nimoy (Spock anciano); Ben Cross (Sarek); Winona Ryder (Amanda Grayson); Chris Hemsworth (George Kirk); Jennifer Morrison (Winona Kirk).

He de decir que nunca he sido un fan, y mucho menos fanático, de toda la saga de películas y series televisivas sobre Star Trek. De hecho, nunca he visto ninguna de las películas enteras y ni un solo episodio tampoco. Conocía al Capitán Kirk y a Spock porque formaban y forman parte de la cultura popular cinematográfica y televisiva, pero poco más. Sin embargo, aunque a prioiri no tenía ninguna intención de ir a ver una nueva película trekkie al cine, el trailer de esta precuela, su punto de vista y todos los reportajes leídos sobre la misma, terminaron por autoconvencerme de que sería una buena manera de empezar a conocer la saga.

Pero después de 2 horas de batallas galácticas mil y una veces vistas en el cine, de un argumento que es más simple que el mecanismo de una goma de borrar y de una puesta en escena que no destaca en ningún momento, uno se queda con la sensación de que ha sido tomado el pelo una vez más gracias a un trailer demasiado espectacular. Cierto es que no se pueden pedir peras al olmo, pero sinceramente esperaba más.

La dirección de J.J.Abrams (creador de Perdidos, la mejor serie de la historia) es correcta, pero olvidable. La labor en la producción de Damon Lindelof (ojalá hubiera sido de guionista, como en dicha serie) se nota sólo en la pasta que se han gastado para la reconstrucción de decorados y creación de efectos especiales. Eso sí, la banda sonora, la música compuesta por el también compositor de Perdidos, Michael Giacchino, es absolutamente soberbia.

A destacar la interpretación que hace el "héroe" Zachary Quinto del mítico Spock en sus años de juventud; la participación en un cameo de una casi irreconocible Winona Ryder (de hecho, yo me enteré de que era ella gracias a los créditos finales); y de la aparición especial de Leonard Nimoy en su habitual papel de Spock de una manera mucho más extensa de lo que cabría esperar en este tipo de apariciones estelares. Imagino que la película está plagada de guiños a las antiguas películas trekkies y a las series televisivas, pero como no he visto ninguna de ellas, lamentablemente no los he podido apreciar. ¡¡ Con lo que me gustan a mí ese tipo de cosas!!

En resumidas cuentas, una película intrascendente más, palomitera al 100% y que como se ha visto en la taquilla, no ha respondido económicamente como se esperaba de ella.